Sergio Espejo: "La DC no puede tomar decisiones que no es capaz de sostener"

El ex integrante del comando de Orrego recuerda como un episodio “vergonzoso” en la historia del partido la derrota de 2013. Dice que muchos líderes que ese año “abandonaron” a su candidato hoy “lloran por lo que no defendieron ayer”.

Pese a que aún quedan días de receso legislativo, varios democratacristianos no se han podido “desconectar” del todo, a raíz del debate que se ha instalado -a más de un mes de la Junta Nacional del partido- respecto de las opciones presidenciales de la DC. Sergio Espejo, vicepresidente de la colectividad y ex integrante del comando de Claudio Orrego en 2013, expresa su molestia con esta discusión.

El senador Andrés Zaldívar dijo a comienzos de febrero, en CNN Chile, que Lagos fue un gran Presidente y que en la DC tiene mucho respaldo. ¿Qué piensa de eso? 

Las figuras históricas, como Lagos y Piñera, más allá de sus méritos, me parecen sólo salvavidas para coaliciones muy confundidas y con débil mirada de futuro.

Tras la última presidencial muchos dijeron que la candidatura de Orrego fue un error. 

Lo que ocurrió fue que el partido tomó una decisión de competir que luego fue abandonada por la inmensa mayoría de nuestros liderazgos, en un episodio vergonzoso de nuestra historia partidaria. Muchos de ellos hoy reclaman porque el gobierno no los considera suficientemente, como si tuvieran derecho a llorar hoy por lo que no defendieron ayer. Lo que la DC tiene que hacer en la próxima Junta Nacional es explicitar su voluntad de liderar el debate sobre el futuro de Chile y abandonar esta suerte de estado de comparsa que le impide, en ocasiones, plantear con fuerza sus ideas.

¿Es posible que ese abandono se repita en 2017, dadas las señales que han surgido en estos días?  

Me parece un severo error y una actitud timorata que no contribuye comenzar a hacer cálculos electorales cuando la tarea de gobierno no está cumplida y cuando la DC no ha articulado una mirada que proponer a los chilenos.

Si ya aparece esta falta de convicción, ¿de todas formas se debería levantar un candidato DC?

Lo que es evidente es que la DC no puede tomar decisiones que luego sea incapaz de sostener. Es decir, no puede resolver candidaturas que después vayan a ser dejadas a su suerte, como ocurrió en la presidencial pasada, donde vivimos episodios bochornosos de abandono. Lo que espero es que construyamos primero una propuesta para Chile, y que evaluemos luego la existencia de liderazgos para representar esa propuesta. Ese es el orden correcto.

¿Son estos apoyos a Lagos una suerte de “parche antes de la herida”, para asegurar, quizás, un liderazgo más de centro que el que podría representar Allende?

Me parece legítima la figura del ex presidente Lagos. Sin embargo, sin haber tenido ninguna discusión de lo que queremos, es extemporáneo al interior de la DC hablar de candidatos de otros partidos. Eso es renunciar ex ante a la tarea de liderar el debate político.

¿Ha incidido la debilidad que algunos advierten en la mesa DC?

Me parece que el problema es más profundo, pero nuestra dirección debe hacerse cargo de esto.

¿Tiene responsabilidad en esto el presidente Jorge Pizarro?

Tengo la impresión de que el presidente del partido no entendió la magnitud del daño que causaba al mantener a firme su conducción en medio de los escándalos por financiamiento de la política, más allá de las investigaciones en curso.

“Error político serio”

¿Qué le pareció la tardanza en la salida de Cristián Riquelme de la Dirección Administrativa de la Presidencia?

No tiene ninguna justificación. Más que un parto inducido, como señaló el ministro Burgos, me parece una sucesión de negligencias médicas. Esto tiene que servirnos para que el gobierno entienda que ni la agenda de probidad ni el discurso sobre las reformas son suficientes para recuperar la confianza ciudadana perdida.

¿Cómo se explica que Bachelet lo mantuviera tanto tiempo?

Me cuesta entenderlo. Desconozco las motivaciones que se tuvieron, y me parece un serio error político del gobierno no haber puesto término a la presencia del señor Riquelme en La Moneda mucho tiempo atrás.

¿Ve afectada la capacidad de tomar decisiones por parte de la Presidenta?

Lo importante es que 2016 tiene que ser el año del delivery: que la gente pueda ver el hormigón de la construcción de nuevos hospitales; la disminución de delitos por la agenda antidelincuencia; que puedan apreciar el impacto en calidad en escuelas y universidades; y el aumento en bienestar que la gratuidad tiene consigo. Y que puedan ver, sobre todo, un mecanismo de control de intereses, de acceso a la información, de transparencia en la función pública… Este no es un año para un nuevo relato, porque el relato está agotado. Es para ejecutar lo que ya se comprometió.

Fuente: LaTercera.com